La respiración es fundamental para nuestra calidad de vida, pero somos muchos que respiramos mal. El ritmo de nuestra respiración es el indicador más inmediato y claro sobre nuestro estado de ánimo. Si le prestamos atención a cómo respiramos nos daremos cuenta que, cada vez que estamos tensos o angustiados nuestra respiración es más corta y acelerada. Una persona con un estado de ánimo equilibrado respira entre 8 y 12 veces por minuto, pero si estás muy agitado(a) puede ser que estás haciendo más de 16 respiraciones por minuto. Controlarla, por lo tanto, es el método más fácil e inmediato para mejorar nuestro estado de ánimo y mantenernos más serenos, relajados y sanos en el día a día.

 

He intentado muchos ejercicios de respiración (¡créame yo respiraba pésimo!) y el ejercicio que más me funcione es el ejercicio de los 4 segundos. La aplicación es sumamente sencilla y consta de los siguientes pasos:

 

1.   Adoptar una postura relajada y cómoda. Puede ser de pie o sentado.

2.  Inspiración. Tomar aire inhalando profundamente durante cuatro segundos por la nariz. Piense en la felicidad y la recarga de energías.

3.  Retiene el aire en los pulmones / abdomen por cuatro segundos. Piense en la expansión de la energía por todo nuestro organismo.

4.  Exhalación. Expulsar el aire por la nariz durante cuatros segundos. Piense en la expulsión de todo lo negativo

5.  Retención de la exhalación por cuatro segundos. Piense en un organismo limpio y listo para la siguiente inspiración.

 

En el inicio puede ser que te mareas y te sientes incómodo. No te preocupes esto desaparece después de unos días practicándolo.

Tómate unos minutos diariamente para realizar este ejercicio y cuando estás en el mar esperando unas olas buenas porqué no hacer unos ejercicios de respiración 😉!?.